¿Que hacemos?
Actividades de ocio y naturaleza

Deportes: Actividades ecuestres, Escalada, Puenting, Barranquismo, Bicicleta de Montaña, Multiaventura, Orientación, Piragüismo, Espeleología, Montañismo, Senderismo, Vehículos Todoterreno, Vela, Vuelo libre, Caza Mayor, Enoturismo, Museos…

La armonía de sus lomas invita a practicar senderismo en alguno de sus dieciocho senderos señalizados, como Las Laderas y Los Castañares, que, por otra parte, son una herramienta excepcional para avistar aves (sobre todo durante las migraciones), recoger setas -pie azul, parasol, faisán de jara y la amanita del césar-, observar la berrea del
ciervo en el tránsito del verano al otoño o conocer la interesante geología de este espacio natural.
Los que buscan mayor aventura, pueden practicar escalada en el Cerro del Hierro, espeleología en las distintas simas, cicloturismo en la Vía Verde de la Sierra Norte, deportes náuticos en el embalse de El Pintado o dedicarse a la caza mayor durante los periodos habilitados para ello.

 

Pero, llegar al corazón de la Sierra no es posible sino se penetra en la cultura que la impregna. Su monumentalidad (26 Bienes de Interés Cultural y 3 conjuntos monumentales, como Constatina), sus centros de arte (exposición de arte contemporáneo de la Car-
tuja de Cazalla) o sus quehaceres cotidianos -viñas y tribunas, anisados tradicionales, campeo del ganado, elaboración de chacinas, apicultura, fabricación de barricas de castaño, minas, batanes y molinos,…- satisfacen al visitante más exigente.

 

¿Dónde y qué comer?
Sugerencias gastronómicas

Una vez más el secreto de nuestras chacinas es herencia de la sabiduría ancestral de los pueblos productores de carnes curadas y resultado de una perfecta armonía entre tiempo, condiciones climatológicas adecuadas y esmero. La tradición de secar la carne para su consumo posterior es tan antigua como lo es la crianza del cerdo en la Sierra Norte, además de ser
una manera de aprovechar las piezas menos valoradas del animal.

Existen múltiples variedades de embutidos procedentes del cerdo ibérico ya que cada tipo de carne produce una chacina diferente, además de los numerosos aliños y modalidades de curación: caña de lomo, lomito, morcón, chorizo ibérico, salchichón, morcilla… Y la joya de la sierra, el jamón ibérico, cada día mejor cotizado en los mercados internacionales e insignia de nuestra cocina por su delicioso e inconfundible sabor.